Casa Rotja is an 18th-century farmhouse, which has been recently restored, with a surrounding garden and in the middle of a lovely piece of land with olive trees and vineyards.
The farmhouse is made up of two accommodations, sleeping 5 and 10 people in each and which has an ancient restored olive press, wine cellar, swimming pool, solarium and an area to make your own paellas.
OPEN ALL YEAR ROUND
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Check-in: 4:00 pm
Check-out: 11:00 am
100% refund if cancelled at least 14 days before arrival date. 50% refund if cancelled at least 7 days before arrival date.
Empezaré por lo bueno, que es más rápido. Casa antigua muy amplia, situada en una zona muy tranquila.
La limpieza salvo en la ropa de cama es aceptable.
Tiene un cuidador de la finca que es lo mejor con diferencia de toda la casa, amble, servicial y muy buena persona.
Bonita prensa en la casa.
Hay leña disponible.
Dentro de lo malo destararía:
Olor muy desagradable en TODA la casa que sale de las tuberías de los muchos baños. Hablando de baños, todos con calentadores eléctricos de capacidad limitada. A esto hay que añadir que ciertos grifos de bastante antigüedad, no funcionaban correctamente, en mi caso el de la bañera aún poniendo la aparte de arriba el grifo seguía saliendo agua, y desgracidamente la más caliente, quemando en 2 ocasiones a mis hijas.
Las toallas son para taparte que NO secarte.
Otro detalle de mimo, es que no te hacen ni la cama, con lo que tú mismo puede advertir las manchas en las fundas de almohadas y colchones.
Hay muchas habitaciones, en mi caso, no probé todas, las camas tenían colchones de muelles para niños, que hacen una tortura el dormir.
Los frigoríficos casi no funcionaban, y si a eso le sumas que llegas con ellos apagados, en un finde no has tenido frío...
Las luces es otro detalle de mala gestión. Muchas están fundidas, y otras es imposible darlas, como algunos focos exteriores, donde por cierto tienes el cuadro de luces cerrado con llave y el cuidador no dispone de la misma. Si pasas una noche de tormenta como nosotros rezas para que no se vayan los plomos ya que la dueña está desaparecida.
Hay muchos salones, pero ninguno con mobiliario para albergar a las personas que alquilan la casa. Si alquilas la casa completa, piensa que como mucho vas a tener un sofa de 2 plazas para todos.
La piscina es mucho más pequeña que lo que parece en las fotos, y la zona de barbacoa está muy deteriorada, con parrillas que dan auténtica pena, sin utensilios para gestionar la leña o eliminar las cenizas.
A esto, hay que sumar que la dueña e
Estuvimos celebrando mi 40 cumpleaños, fue una fiesta sorpresa y la verdad que no pudo ser mejor. La casa es espectacular y el trato de la dueña Maria Rosa exquisito. Por supuesto, nuestro agradecimiento por el trato recibido de Saib, el casero, que en todo momento estubo al tanto de que no nos faltara de nada. Gracias por todo y volveremos. Un abrazo.
La Casa Rotja sorprende en primer lugar por su ubicación, rodeada de naturaleza por todas partes. Dispone de múltiples espacios por lo que se puede disfrutar en grupo y mantener a la vez privacidad. Su exquisita decoración combina con una comodidad actualizada (Electrodomésticos, wifi...). Las habitaciones son espaciosas y los baños y cocina están reformados.
Se puede disfrutar del paellero/ barbacoa, de la piscina y de un precioso patio interior muy bien cuidado y fresco.
Finalmente la propietaria y el casero son muy amables y dan todo tipo de facilidades. En definitiva, un lugar muy recomendable.
Hemos estado en el 50 cumpleaños de una fran amiga el fin de semana pasado y hemos estado super a gusto, ha sido genial, las instalaciones, el entorno, ha sido un finde de ensueño, para repetir. La recomiendo para ir a relajarse al 100%.
Es una casa muy acogedora y bien equipada que ha sabido combinar el encanto de un ambiente de antaño, conservando una decoración de la época con las comodidades que hicieron nuestra estancia muy agradable.
Un trato excelente y un entorno con muchas posibilidades para pasar unos días haciendo excursiones y disfrutando del paisaje, muy recomendable.
Un grupo de amigos pasamos el puente de la Purísima en la Casa Rotja y estuvimos de maravilla. El trato de los caseros perfecto y el ambiente de la casa fenomenal. Aunque hacíamos vida en la parte de abajo, toda la casa esta muy bien equipada. Llevábamos una serie de excursiones programadas y la casa esta muy bien ubicada para ver toda la Vall d'Albaida.